Oscurecido por la quiebra de algunas de sus empresas, Díaz Ferrán pierde uno de los últimos poderes que aun conservaba al ser sustituido en la presidencia de la CEOE por Joan Rosell, ganador de las elecciones a la patronal por amplia mayoría contra Santiago Herrero.
Las quinielas no fallaron esta vez y el dirigente de la patronal catalana, Joan Rosell, se hizo con la victoria con 444 votos a favor, frente a un Santiago Herrero (líder de los empresarios andaluces) que solo obtuvo 247 votos. Joan Rosell, se convertía así en el cuarto presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) sustituyendo a un polémico Díaz Ferrán.
El deterioro de la imagen de la CEOE y un Díaz Ferrán cada vez más hundido por los problemas judiciales de sus empresas, suscitó en los últimos meses una gran polémica que le llevó a convocar elecciones para el 21 de diciembre. Con el nombramiento de Rosell, hoy se ponía fin a una etapa de luces y sombras para comenzar una nueva más esperanzadora para los empresarios españoles.
En sus primeras declaraciones tras conocerse el resultado, Rosell se mostró partidario de acometer reformas como mejor fórmula para mejorar el futuro y dejó la puerta abierta a su contrincante, Santiago Herrero y a su socio y presidente de la Cepyme, Jesús Banegas, para formar parte del nuevo órgano de la CEOE.
Mientras que el ya ex-presidente de la CEOE, Díaz Ferrán, en su discurso de despedida quiso aprovechar para recriminarle al Gobierno el actual “deterioro” de la economía por su tardanza en aplicar las propuestas de los empresarios y la mala gestión del ejecutivo en general. También tuvo palabras de agradecimiento para todos los que le han apoyado y pidió disculpas por los “posibles errores” que hubiera podido cometer.
Tras cuatro años en el cargo, Díaz Ferrán ha sido uno de los presidentes de la patronal que más a dado que hablar, más que por su gestión en el cargo, por las continúas irregularidades en el seno de sus empresas, a las que ha llevado a la quiebra o al concurso de acreedores (antes suspensión de pagos).
Actualmente, Díaz Ferrán se encuentra involucrado en varios procesos judiciales en los que destaca el agujero de 373 millones de euros que dejó en Marsans y por el cual la jueza ha decretado el embargo de sus cuentas y las de su socio, Gonzalo Pascual, tras decretar hace semanas el embargo de cinco fincas rústicas que Díaz Ferrán tiene en un pueblo de Lugo.
Además, el cambio de presidencia en la CEOE, coincide justo con el aniversario del cierre de Air Comet, que dejó a 20.000 personas sin poder volar a sus países en las navidades del año pasado y a cientos de empleados sin cobrar.
Las quinielas no fallaron esta vez y el dirigente de la patronal catalana, Joan Rosell, se hizo con la victoria con 444 votos a favor, frente a un Santiago Herrero (líder de los empresarios andaluces) que solo obtuvo 247 votos. Joan Rosell, se convertía así en el cuarto presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) sustituyendo a un polémico Díaz Ferrán.
El deterioro de la imagen de la CEOE y un Díaz Ferrán cada vez más hundido por los problemas judiciales de sus empresas, suscitó en los últimos meses una gran polémica que le llevó a convocar elecciones para el 21 de diciembre. Con el nombramiento de Rosell, hoy se ponía fin a una etapa de luces y sombras para comenzar una nueva más esperanzadora para los empresarios españoles.
En sus primeras declaraciones tras conocerse el resultado, Rosell se mostró partidario de acometer reformas como mejor fórmula para mejorar el futuro y dejó la puerta abierta a su contrincante, Santiago Herrero y a su socio y presidente de la Cepyme, Jesús Banegas, para formar parte del nuevo órgano de la CEOE.
Mientras que el ya ex-presidente de la CEOE, Díaz Ferrán, en su discurso de despedida quiso aprovechar para recriminarle al Gobierno el actual “deterioro” de la economía por su tardanza en aplicar las propuestas de los empresarios y la mala gestión del ejecutivo en general. También tuvo palabras de agradecimiento para todos los que le han apoyado y pidió disculpas por los “posibles errores” que hubiera podido cometer.
Tras cuatro años en el cargo, Díaz Ferrán ha sido uno de los presidentes de la patronal que más a dado que hablar, más que por su gestión en el cargo, por las continúas irregularidades en el seno de sus empresas, a las que ha llevado a la quiebra o al concurso de acreedores (antes suspensión de pagos).
Actualmente, Díaz Ferrán se encuentra involucrado en varios procesos judiciales en los que destaca el agujero de 373 millones de euros que dejó en Marsans y por el cual la jueza ha decretado el embargo de sus cuentas y las de su socio, Gonzalo Pascual, tras decretar hace semanas el embargo de cinco fincas rústicas que Díaz Ferrán tiene en un pueblo de Lugo.
Además, el cambio de presidencia en la CEOE, coincide justo con el aniversario del cierre de Air Comet, que dejó a 20.000 personas sin poder volar a sus países en las navidades del año pasado y a cientos de empleados sin cobrar.
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